El aeropuerto se considera como un aeródromo para el tráfico regular de aviones.
Es un área definida de la superficie, ya sea de tierra, agua o hielo propuesto para la llegada, salida y movimiento en superficie de aeronaves de distintos tipos con llegadas y salidas nacionales e internacionales.
Habitualmente este término se aplica a todas las pistas donde aterrizan aviones, sin embargo el término correcto es aeródromo.
Los grandes aeropuertos cuentan con pistas de aterrizaje pavimentadas de uno o varios kilómetros de extensión, calles de rodaje, terminales de pasajeros y carga, grandes superficies de estacionamientos, etc.
En los aeropuertos los aviones suelen recibir combustible, mantenimiento y reparaciones.
Un área importante de los aeropuertos es el “centro de control de área”, en el cual se desempeñan los controladores del tráfico aéreo; personas encargadas de dirigir y controlar el movimiento de aeronaves en el aeropuerto y en la zona bajo su jurisdicción.
Se considera también al aeropuerto como la área destinada a dar cabida a las aeronaves mientras se produce el embarque y desembarque de pasajeros y/o productos.
En los aeropuertos hay áreas destinadas al embarque y desembarque, servicios comerciales y aparcamiento de automóviles. Gran parte de los aeropuertos del mundo utilizan maquinas de rayos X para detectar posibles materiales peligrosos que se intenten internar en el país.
Además de todo lo anteriormente dicho, también encontramos dentro de estos recintos la aduana, lugar donde los pasajeros que salen o entran del país son controlados.
Los aeropuertos más importantes ofrecen al pasajero una gran variedad de servicios, como salones VIP, centros comerciales, juegos, restaurantes, etc.
El mayor aeropuerto del mundo es el Aeropuerto Rey Khalid, en Arabia Saudita con un área total de 225 kilómetros cuadrados.